En búsqueda de la molécula-chip: un vistazo a un laboratorio del Instituto de Ciencias de la BUAP

Compartir

Mundo Nuestro. ¿Es posible imaginas una molécula convertida en un chip de computadora? En eso piensan los investigadores del Instituto de Ciencias de la BUAP (ICUAP). Y llevan años en ello. "Ante la demanda del desarrollo de ordenadores a alta velocidad y su miniaturización --se explica en un reportaje que aparece en el portal de la universidad--, en los últimos 15 años investigadores del Instituto de Ciencias de la BUAP (ICUAP) han diseñado moléculas con características de magnetos de una sola molécula. Es decir, de tamaño microscópico que faciliten el almacenamiento de información."

La doctora María Graciela Yasmi Reyes Ortega es la responsable de esta investigación y del Cuerpo Académico 261 “Investigación Química Básica, Teórica y Experimental. Su enseñanza y divulgación con propósitos de sustentabilidad”. Y así explica su propósito: "Obtener este tipo de compuestos permitirá que una sola molécula sirva como un chip de computadora para guardar una gran cantidad de información en un espacio microscópico. Por consiguiente, se incursionaría en el futuro de la computación cuántica.

Así que hablar con ella lleva a intentar reducir el mundo a lo ínfimo. Y pensar en los magnetos. Una molécula diminuta en la que puedes guardar una enorme cantidad de información por unidad de superficie: "Los magnetos poseen propiedades moleculares, como respuesta a luz y a factores ambientales --explica--. Nosotros pretendemos obtener una molécula que tenga muchos iones magnéticos: átomos de metal ionizados y con electrones desapareados; estos son generadores de los espines (campos) magnéticos. Los espines son como alfileres microscópicos en una molécula; no se ven, pero se miden por la generación de su campo magnético."

Reyes Ortega es responsable del Laboratorio de Química Inorgánica del Centro de Química del ICUAP. Ella explica que el diseño de imanes moleculares implica adherir iones metálicos (en este caso de manganeso) en una molécula. Lo anterior, crea una estructura deformada que facilita la generación de un alto estado de espín que tenga una magnetización de largo alcance y que tarde mucho tiempo en desmagnetizarse.



"En el mundo --dice-- muchos tipos de compuestos multimetálicos han sido ampliamente estudiados, especialmente compuestos de coordinación con iones de manganeso, cobalto, disprosio, entre otros, y mezclas de esos iones en una sola molécula. Esto se debe al interés por su carácter científico y desarrollo tecnológico que hará un cambio drástico en la vida de las personas."

En esas andan los científicos del ICUAP. Puedes conocer más de este tema en el portal de la BUAP:

Con diseño de magnetos moleculares, científicos de la BUAP incursionan en la computación cuántica



Compartir

Sobre el autor

Mundo Nuestro