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24 horas en la vida de una mujer

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En los años veinte del siglo pasado un grupo que vacaciona en la rivera francesa se reúnen a platicar. Se hospedan en la misma posada. Hay un matrimonio alemán interesado en la fotografía, un danés amante de la pesca, un matrimonio italiano, Mrs. C una dama inglesa apasionada de los libros y el narrador de la novela.

A lo largo del día cada quien hace lo que quiere, para luego encontrarse en las comidas. En las sobremesas platican de todos los temas. Un día llega al lugar un joven francés muy atractivo que, sin quererlo, se convierte en el centro de las miradas. Él, que resulta encantador, se relaciona con todos con mucha facilidad.

A Madame Henriette, que se hospeda en un hotel cerca de la posada, se le ha visto platicar con él. Ella es una mujer madura esposa de un importante comerciante y madre de dos niños. Un día no llega al hotel a la hora acostumbrada. El marido se preocupa y da aviso a la administración. Se organiza su búsqueda. Él, en el cuarto, encuentra una carta donde ésta le avisa que se ha ido con el joven francés.

La fuga se convierte en el tema central de la conversación de los huéspedes de la posada. Todos la toman en contra de ella porque su comportamiento atenta las buenas costumbres. El narrador no la juzga ni condena y dice que ella tuvo el valor de hacer lo que pensaba era lo correcto. Mrs. C defiende también a Madame Henriette y justifica que haya podido ser presa de sus impulsos y emociones.

24 horas en la vida de una mujer
Stefan Zweig/Editorial Acantilado /Barcelona, 2001



Mrs. C le dice al narrador que quiere platicar porque piensa que él puede entender lo que ella vivió. Ahora tiene 60 años y reconstruye, con los mínimos detalles, las 24 horas en las que estuvo dispuesta a todo por el amor de un joven al que salva cuando evita que se suicide.

De pronto, deslumbrada por la pasión, vive deseos y sentimientos a los que nunca antes había dado lugar. Empujada por una fuerza desconocida, deja que éstos se manifiesten y la envuelvan.

Quería que el joven la amara y deseara como mujer y no solo la viera como su salvadora. Se da cuenta que ella, para él, no es nadie. Es la primera vez que comparte la historia que siempre ha mantenido en absoluto secreto.

El tono del relato es el de una confesión, para el caso de Mrs. C, que ha vivido angustiada por un hecho del pasado del que nunca había hablado. Su interlocutor es un desconocido con el que siente confianza. La confesión la libera de la opresión y al tiempo ella se perdona.

En ella está presente la idea, lo vivió en algún momento, de que una mujer puede apasionarse por otro, a tal punto, que es capaz de sacrificar todo. La confesión al otro, con absoluta franqueza, es la manera que encuentra de decírselo todo así misma.

En esas horas su corazón contradice a su razón. La razón le dice que se aleje, pero su corazón la lleva a actuar de manera que ella nunca antes imaginó. En la confesión busca ser realmente escuchada, que es lo mismo que ser comprendida y no juzgada.

La novela puede calificarse de psicológica y su autor revela un gran conocimiento de la psicología, para el caso de la mujer, como lo comentan diversos especialistas de su obra. En el retrato que hace de Mrs. C trata con profundidad su mundo interior y sus sentimientos. De manera particular el momento, en medio de contradicciones y sufrimientos, pero también de emociones y gozo, en el que ella pudo dejar todo, para seguir el impulso de su pasión.

La escritura de Zweig tiene un ritmo que la hace única. Es directa y está muy cuidada. Cada frase implica un gran trabajo. La narración es bella y perfecta. El lector no puede dejar la lectura y avanzar en la historia. El texto ha sido llevado al cine en 1931, 1944, 1952, 1968 y 2002.

Versión original. Vierundzwanzig Stunden aus dem Leben einer Frau, publicada en 1929. Traducción del alemán al español de María Daniela Landa.

Twitter: @RubenAguilar

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Sobre el autor

Rubén Aguilar Valenzuela

Rubén Aguilar, comunicador y politólogo, un tiempo jesuita, ha sido impulsor de de una veintena de organizaciones de la sociedad civil, entre ellas el Centro Mexicano para la Filantropía (CEMFI), FunSalud y consejero del Instituto Nacional de Nutrición Dr. Salvador Zubirán. Fue consejero de empresas como Grupo Carso, Grupo Alfa y Cinépolis.Licenciado en Filosofía (1969-1972), y un tiempo participó como vocero del gobierno de Vicente Fox. Es Maestro en Sociología (1975-1978), y Doctor en Ciencias Sociales por la Universidad Iberoamericana (1985-1987).